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Estilo de Decoración Clásico Actual

Estilo de Decoración Clásico Actual

A diferencia de lo que muchos puedan pensar, el estilo clásico no está reñido en absoluto con el estilo actual. Pero es cierto que hay que saber combinarlos, así que hoy vamos a daros las claves para hacerlo.
 
LO QUE DEBES SABER...
 
Lujo: los materiales que se utilizan son de alta gama, como las maderas nobles o los azulejos italianos.
 
Shabby chic: este es el nombre que nos servirá para definir esta particular combinación de estilos.
Armonía: lograr el equilibrio y la armonía de ambos estilos es el secreto para conseguir el tipo de decoración que estamos buscando.
 
Cuando hablamos de un estilo clásico, no lo estamos haciendo de algo anticuado con olor a naftalina. Nada más lejos de la realidad. Se trata de buscar la elegancia y la forma de combinar lo clásico, para darle un toque distinguido y ese punto moderno.
 
Materiales de alta gama
 
Lo primero que debemos tener claro, es que los materiales han de ser de alta gama, como por ejemplo techos altos, maderas nobles, azulejos italianos, etc. Es una decoración que podríamos considerar como lujosa.
 
Unos de los detalles que no pueden faltar en un piso de estilo clásico y actual, son sin duda los sofás con capitoné, tapicerías oscuras, lámparas de cristales en el techo, etc. Todos estos detalles llevan a lograr un ambiente señorial, que puede ser perfecto para combinar con una vajilla moderna y de líneas rectas o textiles de aspecto minimalista, para darle un toque más actual.
 
En definitiva, la posibilidad de mezclar el estilo clásico con el actual no tiene mayor secreto que el de buscar los detalles propios y determinantes de cada uno de estos estilos para lograr el aspecto deseado.
 
El secreto está en el equilibrio
 
Si no nos vemos capaces de hacerlo, siempre podemos contar con la ayuda de un decorador que se encargará de contrastar el clasicismo con un toque chic y moderno.
 
Algunos profesionales han dado nombre a esta mezcla de estilos, conocido entre los ámbitos más profesionales como el shabby chic.
 
En el fondo, lo que se está buscando es lograr un efecto elegante, sin resultar pretencioso, pero destacando el buen gusto y sobre todo una sensación de confort.
 
El gran secreto es encontrar el equilibrio, la armonía entre el mobiliario más clásico y elegante, y los muebles y accesorios más modernos.